Con el adiós definitivo al invierno y la llegada de los días más largos, la primavera no solo nos invita a guardar el abrigo y sacar las gafas de sol. También es, aunque no lo parezca, el momento perfecto para tomar decisiones inteligentes con respecto a nuestro hogar. Y no, no hablamos de redecorar el salón (aunque también vale), sino de algo que puede cambiar tu factura energética para siempre: llevar a caso esa instalación de placas solares que llevas posponiendo demasiado tiempo.
Cuando el frío se despide y ya no dependemos tanto de la calefacción, llega una temporada ideal para planificar mejoras sin prisas, sin obras urgentes y sin sufrir las inclemencias del clima. Aprovechar la primavera para transformar la forma en la que consumes energía es una jugada maestra. ¿Por qué? Porque así te adelantas al verano, a las altas temperaturas y al temido aire acondicionado funcionando a todo gas. Y lo mejor: lo que instales ahora, lo agradecerás por décadas.
Al igual que hay que saber apagar la calefacción en invierno y no excederse con su utilización, cuando las temperaturas suben es el momento ideal para preparar nuestra vivienda para la próxima época de frío.
La instalación de placas solares es una gran decisión. La primavera es el mejor momento para tomarla
Muchas personas se preguntan cuándo es el momento adecuado para lanzarse al autoconsumo. Aunque técnicamente se pueden instalar placas solares en cualquier época del año, lo cierto es que la primavera tiene ventajas de sobra:
El clima acompaña: con temperaturas suaves y menos lluvias, la instalación de placas solares es más rápida y segura.
No dependes tanto de la calefacción: lo que te permite planificar sin urgencias y sin impacto inmediato en tu confort diario.
Te preparas para el verano: en lugar de esperar a las primeras olas de calor, ya tendrás tu sistema funcionando cuando llegue el momento de enchufar ventiladores y aires acondicionados.
Empiezas a ahorrar desde ya: cuanto antes instales, antes notarás el ahorro en la factura.
Aprovechas más horas de sol: la primavera marca el comienzo de una temporada con más luz, y eso se traduce en más energía para ti.
Además, es importante tener en cuenta que la instalación de placas solares no solo es una decisión eficiente a corto plazo. Es también una inversión a largo plazo que puede durar 25 años o más. Durante ese tiempo, te estarás beneficiando de una fuente de energía limpia, sostenible y, sobre todo, gratuita.
¿Entonces? Si estabas esperando una señal para pasarte al autoconsumo solar, que la brisa primaveral te la traiga. Ahora es el momento de actuar con cabeza, pensando en el futuro y en el planeta. Dale a tu tejado una razón para brillar.